La delincuencia no tiene fin y los malvivientes no distinguen de edades, esta vez unos adolescentes de entre 11 y 14 años fueron sorprendidos por ladrones en la intersección de calle 505 y 12. Los malvivientes atacaron a piedrazos a los chicos que se encontraban allí con sus bicicletas y, luego de quitarles sus rodados, escaparon velozmente.
Según declararon algunos frentistas, que aseguran estar cansados de la inseguridad en la zona, los agresores tendrían aproximadamente entre 10 y 15 años y aparentemente habrían participado de otros hechos similares en inmediaciones de donde ocurrió este último robo.