
La formación de un nuevo iceberg de 150 metros de espesor, el pasado domingo 22 de enero entre las 16 y las 17 horas de nuestro país, preocupa al mundo por su imenso tamaño: 1550 kilómetros cuadrados. Y rápidamente se hicieron comparaciones para contemplar cuánto es.
Como consecuencia del desprendimiento ocurrido en la plataforma de hielo Brunt, en la Antártida, este bloque estaba previsto que tuviera dicho final ante el análisis de la reconocida grieta Chasm-1 (una década de estudio). Fue el segundo más importante en los últimos dos años.
La plataforma de hielo Brunt es probablemente la más monitoreada de la Tierra. Una red de 16 instrumentos GPS miden la deformación del hielo y la informan cada hora. Lo más seguro es que el iceberg desprendido siga la corriente costera antártica y los glaciólogos de BAS (British Antarctic Survey) también monitorizarán su movimiento.
57 veces el tamaño de La Plata
La Plata tiene una superficie de 27 kilómetros cuadrados, lo que sería poco más de 57 veces el tamaño de este iceberg. Pero de contar el total de todo el Partido de La Plata (926 kilómetros cuadrados), la cifra se reduce al total y poco más de la mitad.
¿Por qué pasó?
Según informan desde British Antartic Survey, en este caso el desprendimiento no ha sido provocado por el cambio climático. Es una parte normal de la vida de una plataforma de hielo alimentada por un glaciar, incluso cuando, como en este caso, los icebergs desprendidos son enormes.