
Que un micro de la línea 275 no se detuviera en una parada, debido a que estaba en su máxima capacidad de pasajeros, fue el detonante de un hecho violento. Una pareja decidió atacar con piedras y adoquines la unidad.
Según informó Infoberisso, los vidrios del transporte público quedaron hechos trizas. Todo comenzó cuando el conductor no frenó en una de las paradas de Punta Lara, en Ensenada.
Asimismo, aseguraron que el hecho provocó heridas en algunos usuarios, y que el chofer ya hizo la denuncia en la Comisaría de la localidad.